Las virtudes prudentes y las virtudes necias
- 28 Agosto 2020
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Agustín, Santo
Memoria Litúrgica, 28 de agosto
Obispo de Hipona y Doctor de la Iglesia
Martirologio Romano: Memoria de san Agustín, obispo y doctor eximio de la Iglesia, el cual, después de una adolescencia inquieta por cuestiones doctrinales y libres costumbres, se convirtió a la fe católica y fue bautizado por san Ambrosio de Milán. Vuelto a su patria, llevó con algunos amigos una vida ascética y entregada al estudio de las Sagradas Escrituras. Elegido después obispo de Hipona, en África, siendo modelo de su grey, la instruyó con abundantes sermones y escritos, con los que también combatió valientemente contra los errores de su tiempo e iluminó con sabiduría la recta fe (430).
Etimológicamente: Agustín = Aquel que es venerado, es de origen latino.
Fecha de canonización: Información no disponible, la antigüedad de los documentos y de las técnicas usadas para archivarlos, la acción del clima, y en muchas ocasiones del mismo ser humano, han impedido que tengamos esta concreta información el día de hoy. Si sabemos que fue canonizado antes de la creación de la Congregación para la causa de los Santos, y que su culto fue aprobado por el Obispo de Roma, el Papa.
Breve Biografía
San Agustín es doctor de la Iglesia, y el más grande de los Padres de la Iglesia, escribió muchos libros de gran valor para la Iglesia y el mundo.
Nació el 13 de noviembre del año 354, en el norte de África. Su madre fue Santa Mónica. Su padre era un hombre pagano de carácter violento.
Santa Mónica había enseñado a su hijo a orar y lo había instruido en la fe. San Agustín cayó gravemente enfermo y pidió que le dieran el Bautismo, pero luego se curó y no se llegó a bautizar. A los estudios se entregó apasionadamente pero, poco a poco, se dejó arrastrar por una vida desordenada.
A los 17 años se unió a una mujer y con ella tuvo un hijo, al que llamaron Adeodato.
Estudió retórica y filosofía. Compartió la corriente del Maniqueísmo, la cual sostiene que el espíritu es el principio de todo bien y la materia, el principio de todo mal.
Diez años después, abandonó este pensamiento. En Milán, obtuvo la Cátedra de Retórica y fue muy bien recibido por San Ambrosio, el Obispo de la ciudad. Agustín, al comenzar a escuchar sus sermones, cambió la opinión que tenía acerca de la Iglesia, de la fe, y de la imagen de Dios.
Santa Mónica trataba de convertirle a través de la oración. Lo había seguido a Milán y quería que se casara con la madre de Adeodato, pero ella decidió regresar a África y dejar al niño con su padre.
Agustín estaba convencido de que la verdad estaba en la Iglesia, pero se resistía a convertirse.
Comprendía el valor de la castidad, pero se le hacía difícil practicarla, lo cual le dificultaba la total conversión al cristianismo. Él decía: “Lo haré pronto, poco a poco; dame más tiempo”. Pero ese “pronto” no llegaba nunca.
Un amigo de Agustín fue a visitarlo y le contó la vida de San Antonio, la cual le impresionó mucho. Él comprendía que era tiempo de avanzar por el camino correcto. Se decía “¿Hasta cuándo? ¿Hasta mañana? ¿Por qué no hoy?”. Mientras repetía esto, oyó la voz de un niño de la casa vecina que cantaba: “toma y lee, toma y lee”. En ese momento, le vino a la memoria que San Antonio se había convertido al escuchar la lectura de un pasaje del Evangelio. San Agustín interpretó las palabras del niño como una señal del Cielo. Dejó de llorar y se dirigió a donde estaba su amigo que tenía en sus manos el Evangelio. Decidieron convertirse y ambos fueron a contar a Santa Mónica lo sucedido, quien dio gracias a Dios. San Agustín tenía 33 años.
San Agustín se dedicó al estudio y a la oración. Hizo penitencia y se preparó para su Bautismo. Lo recibió junto con su amigo Alipio y con su hijo, Adeodato. Decía a Dios: “Demasiado tarde, demasiado tarde empecé a amarte”. Y, también: “Me llamaste a gritos y acabaste por vencer mi sordera”. Su hijo tenía quince años cuando recibió el Bautismo y murió un tiempo después. Él, por su parte, se hizo monje, buscando alcanzar el ideal de la perfección cristiana.
Deseoso de ser útil a la Iglesia, regresó a África. Ahí vivió casi tres años sirviendo a Dios con el ayuno, la oración y las buenas obras. Instruía a sus prójimos con sus discursos y escritos. En el año 391, fue ordenado sacerdote y comenzó a predicar. Cinco años más tarde, se le consagró Obispo de Hipona. Organizó la casa en la que vivía con una serie de reglas convirtiéndola en un monasterio en el que sólo se admitía en la Orden a los que aceptaban vivir bajo la Regla escrita por San Agustín. Esta Regla estaba basada en la sencillez de vida.
Fundó también una rama femenina.
Fue muy caritativo, ayudó mucho a los pobres. Llegó a fundir los vasos sagrados para rescatar a los cautivos. Decía que había que vestir a los necesitados de cada parroquia. Durante los 34 años que fue Obispo defendió con celo y eficacia la fe católica contra las herejías. Escribió más de 60 obras muy importantes para la Iglesia como “Confesiones” y “Sobre la Ciudad de Dios”.
Los últimos años de la vida de San Agustín se vieron turbados por la guerra. El norte de África atravesó momentos difíciles, ya que los vándalos la invadieron destruyéndolo todo a su paso.
A los tres meses, San Agustín cayó enfermo de fiebre y comprendió que ya era el final de su vida. En esta época escribió: “Quien ama a Cristo, no puede tener miedo de encontrarse con Él”.
Murió a los 76 años, 40 de los cuales vivió consagrado al servicio de Dios.
Con él se lega a la posteridad el pensamiento filosófico-teológico más influyente de la historia.
Murió el año 430.
¿Qué nos enseña su vida?
- A pesar de ser pecadores, Dios nos quiere y busca nuestra conversión.
- Aunque tengamos pecados muy graves, Dios nos perdona si nos arrepentimos de corazón.
- El ejemplo y la oración de una madre dejan fruto en la vida de un hijo.
- Ante su conflicto entre los intereses mundanos y los de Dios, prefirió finalmente los de Dios.
- Vivir en comunidad, hacer oración y penitencia, nos acerca siempre a Dios.
- A lograr una conversión profunda en nuestras vidas.
- A morir en la paz de Dios, con la alegría de encontrarnos pronto con Él.
Si quieres conocer más de la vida de San Agustín consulta org
Conoce el nuevo sitio Augustinus.ittiene el objetivo de difundir no sólo algunos aspectos de la figura poliédrica del santo sino toda su personalidad.
Algunos motivos para leer una de las obras cumbre de San Agustín
Lee sus Obras en español
El corazón joven con deseo de Dios
Santo Evangelio según san Mateo 25, 1-13. Viernes XXI del Tiempo Ordinario
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
Cristo, Rey nuestro.
¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor, Tú conoces mejor que nadie mi corazón, sabes cuáles son mis heridas, qué es lo que más anhelo, y que, a fin de cuentas, mi corazón tiene sed de ti. Ayúdame a buscarte siempre para amarte sin condición y que mi corazón sepa que descansará hasta encontrarte.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Mateo 25, 1-13
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: "El Reino de los cielos es semejante a diez jóvenes, que tomando sus lámparas, salieron al encuentro del esposo. Cinco de ellas eran descuidadas y cinco, previsoras. Las descuidadas llevaron sus lámparas, pero no llevaron aceite para llenarlas de nuevo; las previsoras, en cambio, llevaron cada una un frasco de aceite junto con su lámpara. Como el esposo tardaba, les entró sueño y todas se durmieron.
A medianoche se oyó un grito: '¡Ya viene el esposo! ¡Salgan a su encuentro!'. Se levantaron entonces todas aquellas jóvenes y se pusieron a preparar sus lámparas, y las descuidadas dijeron a las previsoras: 'Dennos un poco de su aceite, porque nuestras lámparas se están apagando'. Las previsoras les contestaron: 'No, porque no va a alcanzar para ustedes y para nosotras. Vayan mejor a donde lo venden y cómprenlo'.
Mientras aquellas iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban listas entraron con él al banquete de bodas y se cerró la puerta. Más tarde llegaron las otras jóvenes y dijeron: 'Señor, señor, ábrenos'. Pero él les respondió: 'Yo les aseguro que no las conozco'.
Estén, pues, preparados, porque no saben ni el día ni la hora".
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio
A los jóvenes nos gusta la aventura y los lugares exóticos porque nos emocionan, son ocasiones para mostrar nuestra juventud fuerte y valerosa. Muchas veces este deseo nos lleva a tomar decisiones de las que nos arrepentiremos después, en una palabra, hemos sido imprudentes y, desgraciadamente, a veces esto pueden llevar a la muerte. Nuestra vida joven es una tensión entre este deseo de hacer cosas emocionantes y madurar para convertirnos en personas adultas responsables.
Más allá del peligro de la muerte existe el peligro de la muerte espiritual, que nuestra alma y nuestra relación con Dios se sequen. Tenemos nuestras lámparas que Dios nos ha dado, las podemos pintar del color que queramos, ponerles adornos, pero si nos falta el aceite de la gracia de Dios nuestra lámpara no tiene tanto sentido. El aceite que la llena y le hace dar luz es esencial. Ahora la pregunta que nos podemos plantear es, ¿cómo conseguir este aceite? Ya que nuestro corazón siempre joven nos pide que lo busquemos, debemos saber que este líquido no es fácil de encontrar, es toda una aventura hallar la fuente y tomarla. La tienda de este aceite es propiedad de Dios por lo que le tenemos que pedir que nos lo dé, y no solo la medida, sino que nos conceda tener más por si se nos acaba en el camino o alguien más lo necesita.
Pidámosle al Señor que nos dé todo el aceite que necesitamos en nuestra vida y que podamos seguir los deseos más profundos de nuestro corazón para amarlo y entregarnos totalmente a Él.
«La lámpara es el símbolo de la fe que ilumina nuestra vida, mientras que el aceite es el símbolo de la caridad que alimenta y hace fecunda y creíble la luz de la fe. La condición para estar listos para el encuentro con el Señor no es solo la fe, sino una vida cristiana rica en amor y caridad hacia el prójimo.
Si nos dejamos guiar por aquello que nos parece más cómodo, por la búsqueda de nuestros intereses, nuestra vida se vuelve estéril, incapaz de dar vida a los otros y no acumulamos ninguna reserva de aceite para la lámpara de nuestra fe; y ésta —la fe— se apagará en el momento de la venida del Señor o incluso antes. Si en cambio estamos vigilantes y buscamos hacer el bien, con gestos de amor, de compartir, de servicio al prójimo en dificultades, podemos estar tranquilos mientras esperamos la llegada del novio: el Señor podrá venir en cualquier momento, y tampoco el sueño de la muerte nos asusta, porque tenemos la reserva de aceite, acumulada con las obras buenas de cada día. La fe inspira a la caridad y la caridad custodia a la fe».
(Homilía de S.S. Francisco, 12 de noviembre de 2017).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Tener el valor de salir al encuentro de alguien con quien no me lleve bien.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a ti que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Parábola de las vírgenes necias y prudentes
Las parábolas de Jesús.
Premio o castigo
Las parábolas escatológicas son aquellas que hacen referencia explícita a la situación final de premio o castigo después de la muerte. "Entonces el Reino de los Cielos será semejante a diez vírgenes, que tomaron sus lámparas salieron a recibir al esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco prudentes; pero las necias, al tomar sus lámparas, no llevaron consigo aceite; las prudentes, en cambio, junto con las lámparas llevaron aceite en sus alcuzas. Como tardase en venir el esposo les entró sueño a todas y se durmieron. A medianoche se oyó vocear: ¡Ya está aquí el esposo! ¡Salid a su encuentro! Entonces se levantaron todas aquellas vírgenes y aderezaron sus lámparas. Y las necias dijeron a las prudentes: dadnos de vuestro aceite porque nuestras lámparas se apagan. Pero las prudentes les respondieron: Mejor es que vayáis a quienes lo venden y compréis, no sea que no alcance para vosotras y nosotras. Mientras fueron a comprarlo vino el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas y se cerró la puerta. Luego llegaron las otras vírgenes diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! Pero él les respondió: En verdad os digo que no os conozco. Vigilad, pues, porque no sabéis el día ni la hora"(Mt).
Las buenas acciones
El tiempo de espera puede llevar a que las buenas disposiciones se relajen. No basta tener buenas intenciones, pues deben ir acompañadas por buenas obras. El aceite son las buenas acciones exigidas a cada uno para poder recibir la gracia de entrar en la felicidad divina del cielo. Estar vigilantes en todo tiempo y lugar es la condición necesaria para mantenerse en las buenas obras; deja apagar la lámpara por culpa del sueño es caer en pecado. Y la muerte suele sorprender con su venida.
Reanudarán las Audiencias generales del Papa con presencia de fieles
Durante septiembre serán en el Patio de San Dámaso sin necesidad de boletos.
A través de un comunicado, la Sala de Prensa de la Santa Sede, la Prefectura de la Casa Pontificia informa que el próximo miércoles 2 de septiembre se retoman las Audiencias generales del Santo Padre con la presencia de fieles. Desde el pasado 11 de marzo, a causa de la crisis sanitaria por el COVID-19, las Audiencias generales se realizaron en la Biblioteca del Palacio Apostólico, sin la presencia de personas.
Según informó la Sala de Prensa, las audiencias del mes de septiembre se realizarán en el Patio de San Dámaso del Palacio Apostólico siguiendo las indicaciones sanitarias de las autoridades.
La Audiencia comenzará a las 9.30 horas (hora de Roma) y la participación será abierta a todos aquellos que lo deseen, sin necesidad de entradas. El ingreso se realizará desde las 7.30 por el Puerta de Bronce, en la columnata de la derecha de Plaza San Pedro.
¿Cómo mejorar tu comunicación con un adulto mayor?
A veces la comunicación entre generaciones es complicada. Ten en cuenta estos consejos.
Don Miguel vive en la colonia Río de Luz, en Ecatepec, Estado de México, en compañía de su hijo Miguel Ángel, su nuera y sus tres nietas. Miguel asegura que todos se llevan bien con don Luis, pero a veces se desesperan con él, sobre todo porque en las conversaciones hay que estarle repitiendo una y otra vez las cosas.
“Su problema es auditivo, pero él no ha querido atenderse por más que hemos insistido en que es importante que vaya con un especialista”.
Don Luis, por su parte, también llega a desesperarse por diversas razones -dice Miguel-, y hay días en que se enojay quiere salirse a caminar, pero hoy no puede hacerlo por la pandemia de COVID-19, y entonces todo el día se la pasa enojado.
De acuerdo con Liliana García de los Cobos, psicóloga e integrante de la Pastoral Familiar de la Arquidiócesis de México y Sarahi Elvira Franco, de la Fundación para el Bienestar del Adulto Mayor I.A.P, muchos de los problemas que afectan la convivencia están relacionados con la falta de fluidez en la comunicación.
Por un lado, las personas de menor edad están acostumbradas a tratos más dinámicos al relacionarse de manera cotidiana con gente de su edad, explican, y por el otro, las personas de la tercera edad necesitan tiempo, paciencia y un interés manifiesto para acceder a una conversación prolongada.
Por ello, las especialistas dan estas recomendaciones para tener mejor comunicación con los adultos mayores. Y así mejorar el tiempo de calidad que se pasa con ellos.
Al hablar con un adulto mayor:
-Concéntrate en pasar tiempo con la persona, para ello evita los distractores como la televisión o estar revisando el celular. Las personas mayores no están tan acostumbrados a las nuevas tecnologías y pueden tomar un gesto así como falta de interés.
-Establece contacto visual, esto genera un ambiente de confianza y acompañamiento.
– Las generaciones jóvenes pueden utilizar términos que las generaciones mayores no necesariamente entienden, esfuérzate en explicarlos para la persona.
-Una auténtica conversación ocurre entre dos personas. Dale tiempo de platicar y de contestar las preguntas que hagas.
–Habla de temas de su interés, para ello escúchalo, aprende a conocerlo. Tal vez en un inicio no sea tan sencillo reconocer sus gustos, pero podrías identificarlos al escuchar cada vez más anécdotas de su vida.
–Si tiene un problema de salud, como una problema auditivo, regula el volumen de tu voza ello y repite las veces que sea necesario.
Con ayuda de las dos especialistas citadas en este texto preparamos una guía sobre cuidado emocional de los adultos mayores en la nueva normalidad por COVID-19. Puedes leerlo de forma gratuita aquí.
Los 7 mensajes más tiernos del Papa sobre los abuelos
Un aporte de romereports. com para los abuelos
Por: S.S. Papa Francisco | Fuente: http://www.romereports.com
AGRADECIMIENTO
FRANCISCO
6 de julio, 2015
"Quisiera saludar a todos las abuelas y abuelos y agradecerles su preciosa presencia en las familias y para las nuevas generaciones”.
Desde el principio, Francisco ha tenido muy presentes a las personas mayores. En la misa de inicio de pontificado pidió que se les cuide especialmente porque a menudo quedan en la "periferia del corazón”.
Pocos meses después, en la Jornada Mundial de la Juventud de Brasil, habló a los jóvenes sobre la importancia de escuchar a sus mayores.
EUTANASIA CULTURAL
FRANCISCO
25 de julio, 2013
"Esta civilización mundial se pasó de rosca, se pasó de rosca... porque es tal el culto que se ha hecho al Dios dinero que estamos presenciando una filosofía y una praxis de exclusión de los dos polos de la vida que son las promesas de los pueblos. No se cuida a los ancianos porque no se les cuida. Pero está también eutanasia cultural. No se los deja hablar ni actuar”.
Francisco sabe que los abuelos son una pieza fundamental en la vida de los niños. Y lo sabe por propia experiencia gracias al cariño de su abuela Rosa. Así lo explicó en la catequesis dedicada a los abuelos.
EJEMPLO
FRANCISCO
11 de marzo, 2015
"Las palabras de los abuelos tienen algo especial para los jóvenes. Y ellos lo saben. Las palabras que mi abuela me entregó por escrito el día de mi ordenación sacerdotal aún las llevo conmigo, siempre en el breviario, y las leo a menudo y me hace bien”.
Por eso, no se cansa de denunciar los atropellos que se cometen contra las personas mayores a las que se deja de lado en la sociedad. Dice que incluso es pecado.
DESCARTE
FRANCISCO
4 de marzo, 2015
"Es horrible ver a los ancianos descartados. Es feo y es pecado”.
Porque las personas mayores son la memoria de los pueblos y, sobre todo, la de las familias.
TRANSMISORES DE LA FE
FRANCISCO
11 de noviembre, 2013
"Recemos por nuestros abuelos, nuestras abuelas, que tantas veces han tenido un papel heroico en la transmisión de la fe en tiempos de persecución. Cuando papá y mamá no estaban en casa o tenían ideas extrañas, que les enseñaba la política de aquel tiempo, fueron las abuelas quienes transmitieron la fe”.
Como ejemplo de la importancia que tienen los ancianos para el Papa, por primera vez el Vaticano organizó un encuentro dedicado a ellos. Una jornada muy especial a la que asistió Benedicto XVI al que Francisco llama tiernamente "un abuelo sabio”.
SABIOS
FRANCISCO
28 de septiembre, 2014
"He dicho muchas veces que me gusta que viva aquí, en el Vaticano, porque es como tener al abuelo sabio en casa. Gracias”.
El Papa lamentó el olvido y la violencia hacia las personas mayores y explicó que los abuelos aportan una experiencia insustituible.
TERNURA
FRANCISCO
28 de septiembre, 2014
"Una de las cosas más bonitas de la vida de la familia, de nuestra vida, es acariciar a un niño y dejarse acariciar por un abuelo o una abuela”.
No son sólo las palabras, son también los gestos. En audiencias generales, en encuentros o en viajes, el Papa Francisco no pierde oportunidad de saludarlos o detenerse para escucharlos.